El Gobierno ha presentado el Tercer Informe sobre el Cambio Climático en Cataluña (TICCC) en el auditorio del Palau de la Generalitat, que ha coordinado al doctor Javier Martin Vide, catedrático de Geografía Física de la Universidad de Barcelona.
El TICCC reúne una recopilación exhaustiva de la investigación científica sobre esta temática existente a Cataluña, fruto de la participación de 140 autores y 40 revisores procedentes de las principales universidades y centros de investigación del país. En este sentido, el TICCC pretende facilitar la transferencia de conocimiento riguroso, de fuerte base científica, a los responsables de la toma de decisiones.
Con una clara vocación de servicio público y un carácter independiente desde el punto de vista científico, el documento describe las principales evidencias del cambio climático en Cataluña y formula recomendaciones estratégicas, elaboradas por los autores de los diversos capítulos, para reducir las emisiones de gases con efecto de invernadero y adaptar los sistemas naturales y humanos a los efectos del cambio climático.
La evolución del cambio climático y de sus efectos en nuestro país
Según recoge el TICCC, Cataluña experimentará un aumento de la temperatura de 0,8°C este decenio y de 1,4°C hacia el 2050 (con respecto a la media del periodo 1971-2000), y una posible disminución de la precipitación hacia mediados del siglo XXI.
Por otra parte, todos los escenarios climáticos apuntan a un aumento de las temperaturas extremas, las olas de calor, así como las noches tropicales (especialmente en el litoral y prelitoral), las noches y los días cálidos, y la duración de las rachas secas. También hay evidencia de un aumento de la torrencialidad y de la frecuencia de los días con lluvias muy intensas.
Con respecto a los ecosistemas, estos podrían ver superada su capacidad de resiliencia y su funcionamiento y estructura, afectando a la provisión de los servicios que nos ofrecen y que son esenciales para el funcionamiento de la economía y la sociedad catalanas.
Al mismo tiempo, el día a día de los catalanes podría verse afectado con el agravamiento de los efectos de la contaminación atmosférica a causa del aumento de la temperatura, entre otros impactos. El informe también pone de manifiesto importantes impactos sobre el litoral (con afectaciones, entre otros, a la actividad turística y las infraestructuras portuarias y urbanas) y destaca como el incremento de la temperatura del aire, la reducción progresiva de la pluviometría, junto con un aumento de su irregularidad, son elementos preocupantes que afectan directamente al sistema agroalimentario catalán.
El documento constituye un excelente referente con respecto a la regionalización de los análisis y proyecciones sobre el calentamiento global hechas a escala mundial y europea por instituciones como el Grupo Intergubernamental de Expertos en Cambio Climático (IPCC) o la Agencia Europea del Medio Ambiente. Cataluña fue pionera en este esfuerzo de regionalización con el impulso, el año 2005, del Primer Informe sobre el Cambio Climático en Cataluña (cuya segunda edición se publicó el año 2010).